CATIM realiza talleres en Colegio María Inmaculada de Concepción

La comunidad educativa y La Corporación se unen en la tarea de proteger los derechos de los niños y niñas, generando conciencia y promoviendo entornos seguros.

Hasta el Colegio María Inmaculada de Concepción, llegaron profesionales de los programas de Prevención Focalizada Umbral Barrio Norte y Umbral Concepción, con el fin de realizar sesiones de prevención del abuso sexual a cursos de 1 a 4 básicos del establecimiento.

El trabajo colaborativo se llevó a cabo junto al departamento de Formación y Convivencia Escolar, y tuvo por objetivo, a través de la reflexión en aula, revisar los diferentes aspectos relacionados principalmente con la sensibilización, la prevención y la importancia de denunciar y terminar con este tipo de violencia que lamentablemente afecta a niños, niñas y adolescentes.

“Hemos solicitado apoyo a distintos agentes interventores externos que nos ayuden a colaborar para poder enriquecer el trabajo intervencionista con los niños y niñas de nuestro colegio, ayudándolos a entender su corporalidad, la necesidad de incorporación de límites con respecto a su cuerpo y a saber qué hacer frente a situaciones complejas”, señaló Daniela Troncoso Jiménez, psicóloga del departamento de Formación y Convivencia Escolar.

Por su parte, Freddy Venegas Campos, director del PPF Umbral Barrio Norte, señala que “llegar a la comunidad es esencial para nosotros en virtud de la prevención, justamente, de temáticas tan importantes como la prevención del abuso sexual o la prevención de violencia intrafamiliar. También podemos ofrecer orientaciones como profesionales expertos en materia de protección de Derechos, podemos entregar a los establecimientos educacionales. Estar aquí en el establecimiento, posicionarnos y que la comunidad educativa nos conozca, nos permite llegar fundamentalmente a los niños y las familias”.

Con diferentes juegos se fortalecieron las temáticas, se utilizaron recursos visuales y se fomentó la participación activa de los estudiantes en las sesiones. Se abordaron conceptos clave como el respeto a los límites personales, el autocuidado, la importancia de la comunicación y el reconocimiento de situaciones de riesgo. Durante las sesiones, se generó un espacio seguro donde los estudiantes pudieron expresar sus dudas, inquietudes y experiencias relacionadas con el abuso sexual. Los profesionales brindaron información clara y adecuada a su edad, adaptándose a las necesidades de cada curso.

El enfoque preventivo del trabajo realizado apunta a empoderar a los estudiantes, proporcionándoles herramientas para reconocer y enfrentar situaciones de abuso. Se enfatizó la importancia de denunciar cualquier forma de violencia y se les informó sobre los canales disponibles para buscar ayuda y protección.